Donoghue sonrió y no habló más mientras entraba a la ciudad real con Debra.En ese momento, había cuatro entradas a la ciudad real de Westrington, y todas estaban fuertemente custodiadas. Donoghue había vivido en Westrington durante muchos años y estaba muy familiarizado con el lugar. Él burló fácilmente todos los controles de la guardia en la entrada.Una vez que ingresaron, deliberadamente encontró una posada que estaba ubicada en un lugar más apartado y le ordenó al propietario que preparara dos habitaciones.Durante el transcurso de los dos últimos días que pasaron juntos, Donoghue había sido todo un caballero. Era muy inteligente y había impresionado a Debra. Con su poder, Donoghue pudo haberse aprovechado de Debra en cualquier momento, pero no lo hizo. Él tenía un plan. Sería más significativo para él ganarse totalmente el corazón de Debra en lugar de simplemente aprovecharse de su cuerpo. Sabía que Debra y Darryl tenían una gran relación. Si lograra ganarse el corazón de Debr

¡Pum!En ese momento, el cuerpo de Darryl se estremeció y su mente comenzó a dar vueltas. Las lágrimas nublaron su visión mientras miraba a Debra, sin parpadear.¡Realmente era Debra! Ella de verdad estaba junto con Donoghue.Previamente cuando Fred le había informado, Darryl no le había creído. Una vez que vio que realmente era Debra, su corazón se sintió encantado pero lleno de dudas.Al segundo siguiente, Darryl no pudo ocultar más su emoción. Le gritó en voz alta a Debra: “Debra, ¿eres tú? Muchas cosas me han retrasado, por lo que no logré rescatarte de la ciudad real del Nuevo Mundo. Siento haberte dejado sufrir. Pero, estoy tan feliz de ver que estás bien ahora. Es simplemente grandioso”.Después de no haberla visto durante un tiempo, Debra se veía muy bien. Sin embargo, parecía estar más delgada que antes, lo cual hizo que le doliera el corazón a Darryl.El rostro de Debra estaba lleno de dudas. Sus cejas se arquearon mientras le preguntaba a Donoghue: “Hermano Menor, ¿qui

En realidad, Darryl había liberado a las 108 concubinas y no se las dio a los mendigos. Él solo lo dijo para hacer enojar a Donoghue.‘Donoghue, eres paciente, ¿verdad? Veré por cuánto tiempo más podrás soportar esto’, pensó Darryl.La expresión facial de Donoghue cambió inmediatamente tras escucharlo. Él estaba furioso. Había escogido personalmente a todas y cada una de las 108 concubinas. Incluso sentía algo por muchas de ellas. ¿Cómo pudo Darryl, este idiota, entregarlas a los mendigos? ¡Eso era humillante!Al sentir la ira de Donoghue, Darryl se rio y continuó: “Oh, por cierto. ¿Aún recuerdas a tu esposa, Shentel Xion? ¿La que Zhu Bajie secuestró en la antigua tumba de Lu Bu? Ayer recibí la noticia de que tu esposa ha dado a luz al bebé de Zhu Bajie. También dijo que nunca volvería contigo porque no sentía ni un poco de seguridad ya que ni siquiera pudiste proteger a tu propia mujer. Eres un inútil”.Obviamente, Darryl se inventó todo eso. Vio que logró encender la ira de Donog

En ese momento, Debra quería ayudar a Donoghue, pero la Formación Celestial era muy compleja. No podía averiguar en absoluto cómo resolver la formación, por lo que no se atrevió a actuar imprudentemente.Mientras Darryl atacaba a Donoghue con el apoyo de los Guardias Celestiales, él no se olvidó de Debra. “¡Debra! He atrapado a Donoghue. Ya no estás en peligro. No temas; sal de allí rápido”, le gritó Darryl a Debra.‘Hace un rato, tuve que tener mucho cuidado ya que Donoghue estaba con Debra. Ahora que lo atrapé, no hay nada de qué preocuparse’, pensó él.Sin embargo, Darryl se quedó perplejo al ver a Debra quedarse inmóvil en el balcón. Era como si no hubiera escuchado las palabras que dijo.Darryl se preocupó. ‘¿Qué ocurre? ¿Acaso Debra está siendo envenenada por Donoghue?’.Él inmediatamente le ordenó a Fred, quien estaba en el suelo: “Fred, saca a Debra rápidamente”.“¡Sí, Su Majestad!”, respondió Fred.Fred una vez fue discípulo de Donoghue, pero ahora, le era leal a Darryl

En ese momento, todos quedaron alborotados. ¡Todos sus rostros parecían estar sorprendidos!‘¿Qué está pasando?’.‘¿Esta Debra no es la mujer de Su Majestad? ¿Por qué está defendiendo a Donoghue?’.Al mismo tiempo, Darryl también se quedó atónito.Un segundo después, Darryl miró a Debra y no pudo evitar decirle: “Debra, tú…”. Darryl siempre pensó de corazón que Debra estaba bajo el control de Donoghue, y que por eso se negó a irse con Fred anteriormente. Nunca esperó que en el momento más crítico, Debra se apresuraría a defenderlo.Antes de que él pudiera terminar de hablar, Debra lo interrumpió fríamente: “No digas mi nombre”. Debra levantó sus labios rojos y dijo con frialdad. No había ninguna emoción en su rostro exquisito. “Yo no te conozco así que deja de fingir que me conoces”.‘¡¿Ella no me conoce?!’, pensó Darryl. Aquellas palabras golpearon fuertemente su corazón.En ese momento, Darryl solo podía sentir mucho dolor en su corazón. Su visión estaba fija en Debra mientras