”Bien”. El Sabio del Valle Fantasma agitó sus manos con indiferencia. “No hay necesidad de ser tan cortés”. Al Sabio del Valle Fantasma no le importaban las etiquetas sociales mundanas. Sin embargo, Darryl no se atrevió a actuar con tanta rudeza frente a alguien que era casi una existencia divina. Al segundo después, Darryl se rascó la cabeza y preguntó con curiosidad: “Sabio del Valle Fantasma, ¿cómo lo han encerrado en la Torre Exquisita de los Siete Tesoros?”. Darryl sintió curiosidad por su respuesta. Los oficiales civiles, militares, la Emperatriz y Quincy tenían sus ojos puestos en el Sabio del Valle Fantasma; anticipando también por su respuesta. Al igual que Darryl, ellos también estaban muy desconcertados. El Sabio del Valle Fantasma era una persona fenomenal; muchos personajes históricos fueron discípulos suyos. El Sabio del Valle Fantasma era casi como un dios, y había muy pocas personas mejores que él. ¿Quién pudo haberlo encerrado en la Torre Exquisita de l

El Sabio del Valle Fantasma sonrió y miró a Darryl mientras decía: “Cuando observé el área, noté la ventilación de magma debajo del suelo. Pude sentir su volatilidad y creo que en menos de 20 años entrará en erupción para formar un volcán”. El Sabio del Valle Fantasma sonaba muy confiado mientras continuaba diciendo: “Bueno, serían 20 años sin ninguna influencia externa. Si se forma una batalla en la superficie, la explosión de aura de los soldados acelerará el movimiento del magma. Por lo tanto, entraría en erupción mucho antes…”. Todos en el salón se conmocionaron mientras miraban con admiración al Sabio del Valle Fantasma. Estaban asombrados y consternados de que él pudiera sentir el magma bajo tierra con solo una simple mirada hacia la naturaleza. ¡Qué asombroso! El Sabio del Valle Fantasma sí era digno de su título como la persona más fenomenal de todos los tiempos. Darryl admiraba al Sabio del Valle Fantasma. Aquel hombre era tan asombroso que hasta podía adivinar el esta

Quincy siempre había pensado que Darryl era un inútil, excepto por algunos de sus trucos. ¿Cómo podría saber elaborar las Píldoras Absorbentes? ¡Carajo! Darryl se sintió muy molesto al escuchar lo que había dicho Quincy; se rio amargamente. Luego, miró a Quincy y dijo: “Su Alteza, el Sabio del Valle Fantasma estaba seguro de que yo podía hacerlo. Si no confía en que pueda hacerlo, entonces ¿tampoco le cree al Sabio del Valle Fantasma?”. Darryl estaba harto de Quincy, quien jamás perdía la oportunidad de humillarlo. “¿Quién sabe con certeza si eres capaz de refinar elixires?”, respondió Quincy con un tono enojado. Darryl no quiso hacer más comentarios, por lo que simplemente sonrió y dijo: “Entonces, esperemos y veamos…”. “Qué simplista…”. La Emperatriz miró con impotencia a los dos quienes estaban discutiendo; ella sacudió la cabeza y sonrió amargamente. Luego, le ordenó al eunuco que estaba al lado suyo que convocara a todos los Maestros de Elixir del palacio. Poco des

Tum… Los cinco Maestros del Elixir quedaron abrumados por sentimientos de admiración; cayeron de rodillas frente a Darryl y lo elogiaron al unísono. “Príncipe Consorte, usted debe ser la reencarnación del Dios del Elixir. Nosotros lo…”. No era sorprendente que uno pudiera producir Nubes de Elixir a la hora de refinar píldoras de alto grado, ya que la mayoría podía lograrlo. Sin embargo, era impresionante que Darryl pudiera producir una Nube de Elixir con solo refinar píldoras ordinarias. Darryl se rio entre dientes. Luego sonrió levemente mientras levantaba la mano y decía con casualidad: “¿Por qué están arrodillados? Levántense y trabajen en las píldoras…”. Quincy se estremeció ante la escena. Ella se quedó sin palabras mientras miraba fijamente a Darryl. Inicialmente pensó que Darryl era un Maestro del Elixir mediocre, aunque pudiera refinar píldoras. Nunca esperaba que él pudiera producir diez Nubes de Elixir. Darryl solía ser una persona frívola, pero era bastante c

Eira, quien estaba con el Ejército de Moana del Norte, se mordió los labios y le susurró a Ambrose: “Hermano... Escucha a papá; no trabajemos más para Yang Jian”. Eira era una joven de buen corazón; había querido dejar el Ejército de Moana del Norte cuando vio cómo Yang Jian amenazaba la vida de los civiles. Ya no podía quedarse callada después de que Darryl hablara con Ambrose. “Hermana, por favor, silencio”, dijo Ambrose mientras sacudía la cabeza. Darryl se sintió ansioso cuando Ambrose no le respondió. Así que le gritó nuevamente: “Ambrose…”.Sin embargo, Ambrose interrumpió a Darryl antes de que el hombre pudiera decir algo más.  “¡Cállate!”. Ambrose no entendía en absoluto el dolor de Darryl. Él rugió: “Lo que yo haga no tiene nada que ver contigo, así que no intentes decirme lo que tengo que hacer. Puede que me hayas dado la vida, pero eso no significa que seas un buen padre. Ahórrate tus principios de vida”.  ¡Puaj! Darryl lucía amargado y no sabía qué más decirle.