"Señor Gotti, por favor llévale este mensaje por mí a la persona que se atreve a ofenderme"."Aunque esa persona fuera Rey, si no se arrodilla y se disculpa ante mí..."."¡Haré que lo maten y que después desaparezcan su cuerpo!".Exclamó Grey, sonriendo maliciosamente. Se acercó a Mandy y la abofeteó."¿Esta es la supuesta gente que dijiste que podía traerme problemas?"."¡No sé qué clase de hombre es, pero aun así haré que se arrodille ante mí y vea cómo juego contigo!".La sangre comenzó a escurrirse por la comisura de los labios de Mandy, pero su expresión permaneció fría como el hielo.Al ver lo que Grey había hecho, Ryan tembló de miedo.¡Grey Jean estaba buscando la muerte!¡Se atrevió a golpear a la mujer de ese demonio!Ryan apenas y pudo exclamar apresuradamente: "Amo Jean, ya lo entiendo. ¡Por favor, deje de golpearla! Me retractaré de mis palabras inmediatamente".Después de terminar de hablar, se arrastró rápidamente hacia Grey.Su corazón estaba invadido por el

Soldados con uniformes militares y con espadas colgando de la cintura, salieron de los vehículos blindados. Parecían estar a punto de ir a la guerra; sus ojos eran tan agudos como los de un halcón.Una simple mirada suya podía asustar a cualquiera.Casi mil soldados del Campamento de Espada se escondían en las sombras. Algunos ya habían sellado la puerta trasera de la Mansión Nueve, mientras que otros se encontraban a cientos de kilómetros de distancia para vigilar la situación desde lejos.Cada paso era metódico, como si hacer eso fuera parte de su instinto natural.Cientos de hombres formaron algunas filas y comenzaron a marchar hacia adelante.El capitán de los guardias, quien había sido extremadamente arrogante, estaba ahora estupefacto.Tenía un poco de conocimiento y se dio cuenta de quiénes eran esos hombres.Se trataba de uno de los ejércitos más fuertes del País H, ¡el Campamento de Espada!Ya no se atrevió a decir ninguna tontería más. Sus rodillas se debilitaron y rá

Grey había visto cómo funcionaba el mundo, después de todo. A pesar de que todo su cuerpo se mantenía firme, el sudor frío le empapaba la espalda, aun así, apretó los dientes y exigió: "Tú... ¡¿quién eres?!"."¿Quién soy yo?".La expresión de Harvey York era tan cortante como una espada."Soy el esposo de Mandy. Ah, también soy el Príncipe York del que te expresas tan mal"."¿No dijiste que me matarías y, sin un lugar de entierro, harías desaparecer mi cuerpo?"."¡¿Qué?!".Grey se estremeció al escuchar las palabras de Harvey.‘¿El esposo residente de Mandy Zimmer es en realidad el mismísimo Príncipe York?’.‘Esto... esto... esto, ¿cómo puede ser?’.Quinn por fin recuperó el sentido común.Ella se alejó mientras una sonrisa forzada aparecía en sus labios.Ahora, Quinn por fin lo entendía.Por qué solo Mandy era reconocida por la Corporación Cielo.Por qué el objetivo de la propuesta del Príncipe York era una mujer que ya estaba casada.¡Harvey York era el Príncipe York!

Todo el mundo estaba sorprendido.¡Esta era la verdadera conducta del Príncipe York!¡No atacaría a menos que alguien lo atacara a él!Así que, si lo atacaban, ¡seguramente haría pagar a esas personas mil veces más!Incluso Ryan Gotti, quien estaba a su lado, sintió como si su cabeza estuviera entumecida.Ahora sentía que era extremadamente afortunado ya que él solo había perdido su poder, no sus extremidades.Después de hacer eso, Harvey York le lanzó una mirada a Grey Jean, quien estaba en el suelo, y ordenó con frialdad: "Discúlpate y compensa a quien sea necesario en todos los sentidos"."¡Sí, sí, sí, me encargaré de ello inmediatamente!". Grey asintió y se inclinó.Harvey continuó: "¡A partir de ahora, dejaré lisiados a todos si los Jean de Mordu se atreven a entrar a la Ciudad Luz del Sur, aunque sea medio paso!"."¡No me atrevería, no lo haremos!".Grey, en ese momento, perdió todas sus actitudes de heredero multimillonario. Lo único que pudo hacer fue suplicar que Har

En la Montaña Purdue ubicada en la Ciudad de Mordu.La Montaña Purdue era el lugar escénico de cinco estrellas más destacado de Mordu. Normalmente, había muchos peregrinos que iban allí para rezar.Sin embargo, hay una zona restringida detrás de la Montaña Purdue donde la gente común no podía entrar.Los extranjeros sabían que se trataba de una gran residencia de ancianos en la que solo la gente con un estatus lo suficientemente alto merecía alojarse.Pero la verdad era que ese supuesto hogar de ancianos era una enorme mansión.¡La familia Jean de Mordu!La familia Jean, que ocupaba el noveno lugar entre las diez mejores familias del País H, vivía aquí.Toda la parte posterior de la Montaña Purdue estaba compuesta por edificios diseñados estructuradamente alrededor de las elevaciones y las corrientes de agua. Esos edificios estaban diseñados en estilos de áreas abiertas, y había jardines y pabellones por todas partes.Justo en ese momento, en el vestíbulo lateral de la Mansión