"Sr. York, Sra. Zimmer, ambos están aquí. Esta es su invitación, por favor, guárdenla bien".Yvonne Xavier le entregó la invitación a Harvey York respetuosamente. Luego, se dio la vuelta y se fue.Simón Zimmer y Lilian Yates se quedaron muy sorprendidos.‘¡Alguien realmente nos trajo una invitación!’.Los Zimmer también se quedaron boquiabiertos ante este giro de acontecimientos. Harvey York no estaba presumiendo, ¡realmente alguien acudió a darle una invitación!¡Y esa persona no era otra que Yvonne Xavier de la Corporación Cielo!¡Qué honor!Mientras Simón Zimmer y Lilian Yates seguían aturdidos por la sorpresa, su familia fue invitada respetuosamente al banquete.El banquete estaba muy concurrido, y el amplio salón estaba inundado de gente.Mandy Zimmer no prestó atención a la sala llena. En lugar de esto, se volteó para dirigirle a Harvey una mirada severa. "¡Harvey, escúchame!"."¿Eh? ¿No estamos ya dentro?".Harvey York se quedó perplejo.‘Ya estamos dentro, ¿cuál e

Ante las palabras de Harvey, todos le lanzaron miradas de disgusto.Especialmente Lilian, cuyo rostro era ahora tan sombrío como la noche.Comprendía el tipo de persona que era su madre.Cuando Lilian se casó con Simón, él todavía era un hombre ambicioso. Incluso entonces, la Abuela Yates quería ahogar a Lilian hasta matarla por su elección.Como el esposo de Mandy Zimmer había dicho algo tan desvergonzado, no había forma de hacer que la Abuela Yates volviera a admirar a la familia.Como se había previsto, la Abuela Yates exhaló en silencio, luego giró sobre sus talones y se fue. Ni siquiera miró a la familia de Mandy Zimmer mientras se alejaba.Keith Yates miró con frialdad a Harvey York, luego se dio la vuelta y se fue también.Como Mandy Zimmer era muy capaz a los ojos de los Yates, podían aceptarla como pariente.Pero como se había casado con un hombre como Harvey, toda la familia tenía que reconsiderar si debían aceptarla realmente."Está bien, cuñado. La Abuela Yates sue

Mientras todos hablaban de ellos, varios hombres uniformados entraron con elegancia en la sala de banquetes.Un joven los encabezaba. Parecía tener unos veintisiete o veintiocho años, pero llevaba la gracia de una élite.Era el hijo de Keith y primo de Mandy, Finn Yates.Era un inspector capitán en la comisaría de Buckwood, y por lo tanto poseía cierto grado de autoridad en Buckwood.Entró en la sala, seguido por sus hombres, con aspecto triunfante."Abuela, padre. Permítanme presentarles, este es el segundo al mando de la comisaría de Buckwood, el subinspector Greg Finch. Este es el tercero al mando, Kevin Caulfield...".Finn presentó a siete u ocho altos cargos de la comisaría de Buckwood. Todas estas figuras que estaban uno o dos niveles por encima de él.Sin embargo, el inspector en jefe no estaba presente.Todos estos altos cargos respetaban a Finn Yates.Bajo la dirección de Finn, cada uno de ellos presentó sus regalos y felicitó a la Abuela Yates."¡Le deseamos a la Ab

La multitud enloqueció al oír esto y comenzaron a especular sobre esto frenéticamente.La identidad de Finn Yates era ya muy extraordinaria. ¿Qué tan bueno podría llegar a ser la persona a la que él elogiara?Un invitado desconcertado preguntó: "¿No dijo la familia Yates que Finn es el joven con más talento de su generación? ¿Hay algún otro cuñado igual de capaz?"."¿Cómo es posible que una nieta de la familia Yates se case con una persona corriente? Sin importar que, seguramente escogería a un hombre rico y poderoso, ¿cierto?".Las miradas de la multitud se dirigieron de persona a persona y finalmente se posaron en Harvey York. Al verlo, comenzaron a temblar."¡Este hombre, su forma de actuar...!".Los Zimmer, que estaban entre la multitud, se veían terriblemente nerviosos. Cuando escucharon el chisme, intercambiaron miradas y estallaron en risas. Quinn Zimmer se tapó la boca mientras reía y dijo: "¡Abuelo, ahora por fin sé por qué los Yates admiraban a Mandy y a su familia!".

¡Paf!Bajo la mirada sorprendida de la multitud, la Abuela Yates golpeó con su bastón la espalda de Harvey.Después de golpearlo, le espetó con frialdad: "¡Es importante conocer tus propias limitaciones! ¿No eres consciente de tus capacidades?".A continuación, señalo con su bastón a Simón y Lilian."¡Disciplina adecuadamente a tu yerno! ¿Cómo es que no puede comprender cuándo hablar y cuándo no?"."¡Si no sabes cómo enseñarle correctamente, entonces salgan de aquí!"."¡Se supone que mi banquete de cumpleaños debe ser feliz, no un circo donde un payaso puede actuar como un loco!".Sus palabras eran demasiado pesadas.Simón y Lilian se quedaron boquiabiertos. Solo pudieron agachar la cabeza y permanecer en silencio.Lagrimas salían de los ojos de Lilian.¡Esta era su familia!Soñaba con volver a su familia llena de gracia.Sin embargo, en el momento que regresó, se veía obligada a soportar una vergüenza de esta magnitud.En ese momento, quería ahorcarse.¡Qué vergüenza!¡